miércoles, 13 de diciembre de 2017

7. El Sabor de una Posible Ruptura

Desperté por la respiración del Kike que llegaba justo atrás de mi oreja, lo que me producía cosquillas, me acomodé para quedar frente a frente con él, las mariposas en mi estómago revoloteaban libremente, sentía que quería gritar y abrazarlos muy fuerte, así que, sin aguantarlo más lo hice, el aun dormido me abrazó y sentí algo muy cálido en mi pecho, la alegría de tenerlo a mi lado me abrumaba.

Vi la hora desde el reloj de mi pieza e indicaban las 12 de la tarde, según mis cálculos y por lo silenciosa que estaba la casa, sabía que mi mamá fue a la feria con mis hermanos, así que aproveché de levantarme y ducharme rápidamente.

Cuando entré a mi pieza vi que mi hermoso pololo estaba despierto mirando su celular, a penas entre me miro.

- estaba a punto de llamarte para saber que hacer – dijo
- si quieres puedes ducharte, mi mamá fue a la feria, así que debe estar por volver – le indique.
- Esta bien – dijo – solo porque cache que apesto un poco – se rio

Le preste una toalla y se fue a duchar, mientras yo ordenaba mi pieza. Su ducha al igual que la mía no fue tan larga, llego a la pieza y se desnudó sin pudor alguno frente a mí, ver su cuerpo era una provocación latente para mí, quería abalanzarme sobre él y lamerle todo el cuerpo, pero reprimí todos esos instintos salvajes.

- Oye vístete para que vallamos a comer algo – dije algo nervioso
- está bien, tengo hambre – dijo – y por cómo me miras yo creo que tú también – me rio  
- Si, quizás un poco podría ser – dije
- te quieres comer esto – dijo mostrándome su pene, no mentiría que si tenía ganas, pero podría llegar mi mamá.
- Quizás en otro momento – dije cerrándole un ojo.

Salí de la pieza para poner la tetera, aunque deje de hacerlo ya que si había algo que nos unía a mí y al Kike es que nos encantaba tomar leche para desayuno y once así que calenté dos tazas en el microondas. Sentí sus pasos así que quería consultarle que quería.

- Oye Kike – dije
- Mande – me respondió
- quieres leche con café o con milo o con cereal – dije, ya que sabía que esas tres opciones le gustaban por igual.
- con café esta super por ahora – respondió – quieres que tueste el pan mientras – dijo
- Si por favor, hare una palta mientras – sabía que eran sus favoritas.

Así de cotidiano fue nuestro desayuno, todo de algún modo más íntimo, hasta que llego mi mamá con mis hermanos, con el Kike les ayudamos con las bolsas que se veían muy pesadas, yo creo que en ese instante mi madre amó un poco más a su yerno, aunque ella no lo sabía.

Llegó la hora que él se fuera, así que lo acompañe hasta donde pasaba la micro, nos despedimos de un abrazo, realmente una vez que se fue sentí un vacío, pero sabía que lo vería en la universidad y que hablaríamos por WhatsApp.

El resto del día se me hizo eterno, realmente no quería hacer nada, me dolía la cabeza y sentía el cuerpo molido, solo quería dormir, mi teléfono vibro, al verlo era un número desconocido, por lo que dude si debía contestar o no

- ¿Aló? – dije
- ¿Camilo? – Dijo una voz desde el otro lado de la línea, era una voz que conocía muy bien
- Pipe, ¿Qué quieres? – dije un tanto brusco
- Espero no haberte molestado, solo quería hablar contigo – dijo
- No es un buen momento – respondí – no quiero tener problemas Pipe
- no quiero generarte problemas, solo quería disculparme por lo de anoche, fue algo que no debí haber hecho – me explicó
- Si, menos mal te diste cuenta, eso habla bien de tus intenciones, de verdad Pipe, ya estoy en otra… - el me interrumpió.
- Si lo se Camilo, anoche me di cuenta de eso, vi como lo mirabas y no sabes cuánto me duele que hayas seguido adelante, me gustaría decirte esto a la cara, pero sé que no querrás escucharme, sé que sonare egoísta, pero odio que hayas dado vuelta la página tan rápido, yo siempre te voy a querer camilo, siempre estarás en mi corazón, aunque mil y una barrera nos separe no te olvidaré, no como tú lo hiciste – dijo, lo último pareció un sollozo, no quería imaginármelo llorando, no quería recaer en esto otra vez, no podía negar que las palabras del si hubieran llegado en el momento justo, hubieran tenido el poder de cambiar todas mis decisiones, pero lamentablemente llegaron tarde, sus miedo pudieron más y me entristecía eso, no por el plano amoroso, si no por la amistad que perdí, no tengo muchos amigos verdaderos y el Pipe en su minuto lo fue.
- Pipe, no digas eso, tú fuiste el que dio vuelta la página primero, yo sufrí por mucho tiempo, no sabes cuánto, estuve solo batallando contra esto, cuando tú estabas gritando a los cuatro vientos tu supuesta felicidad junto a tu nueva polola, con la que esperaban un hijo, realmente eso fue un golpe bajo, nunca supe si pensabas en mi cuando dejabas que la otra publicara tantas cosas de ustedes, yo jamás hubiera permitido que alguien le hiciera eso a la persona que supuestamente querías, Pipe, lo nuestro fue algo muy lindo no te lo voy a negar, no termino bien, pero no porque yo lo quisiera, sino porque tú lo elegiste, hoy en día al fin puedo decir que estoy bien y espero lo mismo para ti, pero no puedo decirte que aun te quiero porque mas allá de un cariño de amigos no te tengo – respondí
- no me digas eso camilo, me estas matando – dijo – yo te amo, te amo desde siempre, estaba esperando a que las cosas estuvieran más tranquilas para volver por ti camilo, para que volviéramos a ser solo los dos – dijo levantando la voz – nunca te olvide, no sabes lo duro que ha sido todo esto para mí, si mi hijo no existiera no tendría fuerzas para vivir, eso y el pensar que algún día podríamos volver a estar juntos.
- Pipe, mira… - me interrumpió
- No digas nada camilo, ya me quedo todo claro y dile a tu pololo que lo odio, con todo mi corazón lo odio porque me quito tu amor, pero a pesar de eso les deseo lo mejor, porque como te amo, quiero que seas feliz, chao camilo, por favor no me olvides porque yo no lo haré – antes de que fuera a decir algo, corto la llamada.

Me quede mirando mi celular un tiempo, no sabía a ciencia cierta que hacer, quería creer que este si era el cierre definitivo de todo, pero realmente teniendo al Pipe diciéndome te amo ahora no ayudaba mucho, sabía que tenía claro que mis sentimientos apuntaban hacia Enrique y quería creer que nada influiría en eso, pero en el corazón y la cabeza no se manda y esperaba no caer en una confusión estúpida.


********-*********-********


Los días pasaron en la universidad y así los meses continuaron pasando, la llamada que recibí de parte del Pipe se la comente a mi pololo, quería que las cosas se mantuvieran transparentes entre ambos, y aunque no decirle no sería una mentira si no que más bien una omisión, no quería que los problemas reinaran entre nosotros.

Diciembre llegó y con ello nuestras añoradas vacaciones de verano, por un lado, estaba feliz y por otro no quería salir por el tan solo hecho que ya no vería al enrique todos los días, eso me tenía un poco triste, pero tras el estrés de fin de semestre sabía que necesitaba este descanso, por lo demás ya llevábamos tres meses de pololeo intenso, de más altos que bajos, y esperaba que las cosas siguieran así.

Con el Kike teníamos planeado unos días en la playa, teníamos todo visto, esos días serian solo para nosotros, serían muy reconfortantes, los deseaba con ansias, iríamos a La Serena, un lugar que en lo personal no conocía, pero por los comentarios de referencia tenía muchas ganas de hacerlo.

Como ya saben los fines de semestre traen consigo los tan famosos foros, ese día viernes no tenía clases, pero le prometí a todos que iría un rato, con el Kike nos habíamos puesto de acuerdo con unos amigos suyos para seguir el carrete en la casa del Maxi y luego me iría a la casa del Kike a pasar la noche. Se veía un muy buen panorama.

Cuando llegué no todo fue tan bien como lo planeado, primero porque ya todos estaban arriba de la pelota y dispersos así que no sabía para donde ir, luego me encontré con la amable sorpresa que mi hermoso novio estaba en el grupo del gay más simpático de todos, el gran amigo cesar, lo quería matar. A ambos. El me vio llegar y supo que no estaba feliz, noté que estaba un poco ebrio, pero al menos se corrió del lado de él y mi mirada le indicaba que si seguían tan juntos esto no terminaría tan bien.

Saludé a todos cordialmente, no quería dirigirle la palabra a mi pololo aun, había hecho algo que yo le dije desde el día uno que a mí me molestaba. Me hice el tonto todo el rato, comencé a tomar muchas cosas suaves, no quería curarme tan rápido.

Durante toda la tarde tuve que aguantar las no agradables bromas de todos y más aún del amigo cesar hacia mi pololo, por lo visto nadie sospechaba de lo nuestro, pero yo podía jurar que, si lo hacían, al conocer eso, nunca en mi vida había deseado tanto contarles a todos, pero era parte de mi barrera porque el Kike había querido hacerlo desde hace tiempo. Me odie profundamente, estaba en esa etapa de profundo odio conmigo mismo hasta que escuche como el amigo en su estado de maraca curada hablaba cada vez más cosas incoherentes, pero una me llamo la atención.

- El Kike ya no me contesta el celular – dijo – el otro día lo llame y me dejo el visto – mire a mi pololo el que puso cara de trágame tierra, así que él tenía su número, mi paciencia se estaba acabando, mis celos estaban a flor de piel, por primera vez en mi vida quería golpear algo, destruirlo.
- no nada que ver – dijo el aludido
- si, antes hablábamos caleta, ahora me pesca a veces no más – dijo a lo que todo el resto dijo ¡uyyyy!, definitivamente lo detestaba, ya me sentía mal, además los tragos se me habían subido y en cualquier minuto hablaría y dejaría la cagada, simulando una llamada, me levanté del grupo y me fui disimuladamente a ningún lado en específico, solo camine, hasta que vi un negocio abierto, no había nada mejor para calmar mi ánimo que comer, me comí un rico completo que me ayudo de algo.

No quería a volver a donde estaba el resto, así que me senté en un lugar alejado hasta que la necesidad me llamo y tuve que ir al baño. No era muy tarde así que encontré uno que estaba super piola y casi vacío así que pude hacer pis sin interrupciones. Mi celular vibró, era el Kike.

- Dime – dije
- ¿Dónde estás? – preguntó
- En el baño – respondí
- ah dale y ¿volverás? – consulto
- No lo creo, no me caen muy bien esos amigos, además hablo a veces con ellos y se ponen medios desubicados, si hubiera sabido que los demás no estaban no hubiera venido – dije sin mas
- ¿Estás enojado? – volvió a preguntar el muy tonto
- no quiero responderte nada hiriente, así que evita preguntar cosas obvias, tu diviértete que yo me iré a mi casa mejor – dije, corte el teléfono, mi humor cambio drásticamente, no andaba con mis cosas, las había dejado en el grupo, así que tendría que volver a buscarlas, era una real paja, no quería ir solo con mi cara de amurrado, hasta que caminando encontré a mi blanco perfecto, el Maxi, el mejor amigo del Kike, iba en dirección al baño.
- Buena perro – me dijo – cada día con más pinta – me alabó
- gracias Maxi, ¿Cómo es que andas solo? – pregunté intentando molestarlo.
- Deje a la minita por ahí – se rio – como estamos para el carrete, se viene bueno – dijo
- No iré maxi – dije
- y porque, que paso perro – dijo
- te digo si me acompañas a buscar mis cosas, será super rápido y te doy una chela – dije.
- Dale, pero deja ir al baño primero – respondió
- acepto, te esperare afuera.

así caminamos hasta el baño y luego hasta donde estaban los demás y mis cosas, le dije todo a él, que era de las pocas personas que sabían todo, el maxi podía ser muy zorron y cuico a morir, pero sin duda era una gran persona, al menos nunca nos juzgaba a mi o al Kike y sin duda era un gran amigo de él, de esos amigos que difícilmente encuentras.

Llegue hasta donde estaban los demás, el Kike seguía sentado donde mismo, mientras hablaban, se veía pensativo, por otro lado, el amiguito Cesar no se veía por ninguna parte, así que tome mis cosas y me despedí de todos, el Kike se levantó y se fue a mi lado. El maxi por su parte saludo solo a algunos de los presentes para luego ir conmigo también.

- Gracias Maxi eres el mejor, toma – Le pase una cerveza que saque de las cosas que tenían los demás, era una en lata, pero de las grandes casi de litro (Realmente no se cuánto hacen)
- Un gusto hacer tratos contigo – recibió la lata – ya, entonces si no te veo más camilo que pases unas buenas vacaciones, y cuídate harto y descansa bro, quizás más adelante me saque un carrete en la playita así que te invitare ahí si que no puedes fallar.
- Obvio que no, ese no me lo perdería por nada – nos despedimos y el maxi se fue por su conquista de la noche que sin duda si hubiera ido a su carrete, sabría de quien se trata.

Caminé ignorando al Kike que venía conmigo, estaba muy enojado con él, en extremo, se notaba que no me contaba nada, al menos yo cuando paso lo del pipe tuve la decencia de decirle hasta cuando me llamó, en cambio el escondió todo.

- Camilo, vas a hablarme en algún minuto – dijo.
- No tenía la intención de hacerlo, ahora me iré a mi casa, le diré a mi mamá que se canceló todo, no te preocupes que si quieres puedes volver, no es mi intención cagar tu noche – seguí caminando.
- oye camilo, pero teníamos planes, no te vayas así – me dio rabia, tenía que sacarla de algún modo.
- cómo no quieres que me vaya enojado porque mi pololo anda todavía webiando con alguien que él sabe que me molesta o triste porque realmente me doy cuenta que no se si puedo confiar en ti o peor aún con la incertidumbre de si no has hecho algo ya – dije y el solo me miraba
- sé que fue un error no decirte nada, pero para mí no significo nada, además él siempre me insiste en cosas y yo lo ignoro, desde que estamos juntos nunca ha pasado nada con él – ahora me enoje aún mas
- siempre te insiste, y te cuesta mucho decirle que estas pololeando o mejor aún lo bloqueas de todas las mierdas – dije
- Tampoco quiero ser mala onda – dijo
- Bueno, espero que tus prioridades te sirvan de algo, tienes el camino libre para ir a ser buena onda con tu amigo – tenía mucha rabia.
- tampoco seas así, tu sabes que te quiero a ti y no a él, ahora mismo me estaba molestando y me negué a todo – dijo como si eso fuera un gran merito
- Gracias por respetarme, que quieres que te dé un premio por no ponerme el gorro, te pasas, realmente te pasas – dije – y cómo es que te molestaba, que te estaba diciendo
- te vas a enojar – dijo
- no me vengas ahora tú con eso, no eres un niño y yo no soy tu mamá para que me tengas miedo – respondí – además ya estoy enojado, prefiero que me digas todo ahora y por goteras.
- me estaba invitando al baño, justo antes que llegaras se había ido y me dijo que lo siguiera – me respondió
- así que por eso estabas tan pensativo, te interrumpí, ahora si que no sé que pensar, alguien no te dice cosas así por así sin tener algo en lo que basarse – dije, tenía rabia, mucha rabia no sabía que hacer, sentía que comenzaba a desesperarme -  está en ti dejarle claro los límites y no en mí, yo no podría ir a decirle nada, porque para el yo no soy más que un amigo tuyo, si tan solo le hubieras dicho que no estabas soltero, todo sería distinto, al menos yo si le deje claras las cosas a todo el mundo desde que estoy contigo, pero ya veo que tu no lo haces – tome una respiración – sabes que siento que con esto no llegare a ningún lado, prefiero irme al menos así tratare de calmarme, eres libre de hacer lo que quieras, total ya nada me sorprendería. Chao – Camine en dirección a la salida, pero tras dar un par de pasos me devolví, si había alguien que no me agradaba era el Cesar, asi que aprovecharía esta instancia para descargarme un poco también con él – Sabes que, esto lo vamos a arreglar ahora mismo – dije
- ¿Qué vas a hacer? – Consultó
- Algo que tú no tienes los huevos para hacer, vamos a ir donde tu amigo y el que va a tener problemas con el soy yo, así tu quedas libre de todo y no eres mala onda con el pobre niño – camine en dirección al baño más cercano, esperaba que fuere ese del que hablaban porque si no mi trayecto habría sido en vano.

Camine enfurecido, veía a mucha gente, la universidad estaba llena, había gente por doquier, todos muy curados o simplemente drogados, a lo lejos divise al Cesar caminando de regreso al grupo de amigos, lo más probable era que se dio por vencido de esperar al Kike, el otro susodicho, venia caminando atrás de mí, llamando mi atención a cada instante.

- Cesar – Dije llamando su atención
- Dime Camilo – dijo sonriendo, pero muy falsamente, se notaba que nuestra mala onda era mutua y no saben cuánto me alegraba de eso. Miro por sobre mi hombro y vio al Kike, ahí su cara se iluminó
- ¿Podemos hablar? Será muy corto – dije – pero aquí hay mucha gente busquemos un lugar más piola.
- Dale – dijo, su cara indicaba curiosidad.

Caminamos a un sector de estacionamiento, había un par de personas, pero no tantas como en el lugar anterior que estábamos.

- Qué me querías decir y porqué está el Kike escuchando – cuestionó
- Solo te quiero decir de la forma más amable de todas y así nos evitamos problemas que dejes de molestar a mi pololo – dije mirando al Kike, su cara era de incredulidad, noté además que mis palabras no se las esperaba, ahí recién me di cuenta que el Kike no era solo un webeo para él, sino que significaba algo más.
- ¿El Kike es tu pololo? – Consulto con incredulidad.
- Si es mi pololo de hace tiempo, espero que por favor no tires tallas del tipo que tiraste hace un rato frente a todos, a mí me molestó bastante y no quiero tener problemas contigo – dije, no sé de que parte sacaba contención, porque verdaderamente estaba enojado y sentía la adrenalina al mil por ciento.
- No crees que es el quien debería decirme esto, porque a él no lo veo quejarse de las cosas que hablamos – dijo con cara de suficiencia – además es el quien te debe explicaciones a ti, no yo.
- Eso lo tengo más que claro, no me tomes por weon, solo te estoy dejando los limites bien claritos a ti, podré ser la persona más tranquila de todas, pero provócame y sabrás quien soy – odiaba la situación en la que estaba, estaba dando un espectáculo de flaiterio tremendo, pero ese minuto solo quería matar a alguien.
- No te tengo miedo – me respondió – si me quieres amenazar no estoy ni ahí, además a tu pololito yo no lo ando acosando, es el quien me habla, yo solo respondo – dijo, se notaba que disfrutaba decirme palabras hirientes, pero no sabía que en momentos así una coraza cubría mis emociones, podría salir bien de este encuentro, pero tal como una tortuga una vez que saliera de mi refugio seria nuevamente vulnerable.
- Eso ya lo hablare después con el – Miré al Kike y estaba mudo por lo que supuse seria verdad todo lo que decía el Cesar – si te hablaba tanto como dices quizás y te deje el camino libre, a ver si así te pescan, a nadie le falta dios y el no sería la primera persona que cambia carne por charqui.
- El ya probo este charqui y le gustó por eso siempre me habla y quiere estar conmigo – estaba llegando a mi limite, pero sobre todo porque el Kike no decía nada, ni mucho menos lo desmentía, quería llorar, pero no era el momento.
- No hables weas que son mentira cesar, yo nunca te escribo, eres tú el que siempre me está llamando por todo y si te contesto es por ser amable contigo, ya no te pesco en WhatsApp por lo mismo, no hablamos de nada hace caleta y si hay mensajes son tuyos insinuándote, yo solo hablo contigo por no ser mala onda – al fin dijo el Kike, tras todo ese discurso me miró con ojos suplicantes, deseando que le creyera, pero ya no sabía que era lo correcto.
- ¿Estás seguro? – casi grito el Cesar – Eres un mentiroso, siempre me seguías el juego en todo, ahora no te vengas a lavar las manos – lo enfrentó
- Nunca hice algo así, no pensaba que eras de esa forma, está claro que mi amabilidad llega hasta aquí contigo, nunca quise hacerte sentir mal o decirte algo hiriente, pero con esto que estás haciendo ya todo me queda claro – dijo
- miren no es por interrumpir su pelea, pero con que ya entiendas que el Kike es mi pololo y si quieres ser su amigo ahí ya verá el que hace, pero al menos respeta eso y no tires comentarios desubicados como los que siempre tiras – camine para irme de ahí, había gente que escucho la conversación, pero no me importó, le di un casi empujón al cesar para que me diera permiso, no espere nada y solo me fui.

Caminé hacia la salida, no sabía si creer a las palabras del Cesar o no, pero si era un hecho que ellos hablaban, puede que él no le respondiera nada o que solo fuera cordial, pero como se sentirían ustedes si su pololo habla con su ex y más encima su ex se le insinúa constantemente e incluso lo llama, el Cesar logro sembrar la semilla de la duda en mí y realmente no sabía que creer.

Tomé mi celular y llamé a mi amiga, sabía que la Cote era la adecuada para este minuto, necesitaba un buen consejo, tenía claro que ella le avisaría a la Andrea y estarían ellas para mí. Como supuse ella no puso ningún problema y me esperaba en su casa, realmente la amaba.

Alguien me tomó del brazo cuando estaba a punto de llegar a la salida, era el Kike, quien lucía agitado, se notaba que había corrido hasta alcanzarme.

- Camilo, no te vayas solucionemos esto ahora mismo – dijo – ya le dejé todo claro al Cesar
- No quiero hablar ni una mierda contigo, eres un mentiroso, hablabas siempre con él, se llamaban y quizás que cosas más hacían juntos, ya no confió en ti Kike, pero porque realmente me has dado motivos para hacerlo, yo siempre fui sincero contigo, pero si quieres que las cosas sean así, mañana mismo le hablo al Pipe, para que juguemos el mismo juego, pero después no te quejes, porque no tienes derecho – respondí
- Tú no eres así, y si lo haces me lo voy a merecer, pero no termines conmigo por favor, hablemos, solucionemos esto ahora – decía
- Te dije que no quiero hablar nada por ahora, me siento mal, lastimado y enojado, si hablamos ahora terminaremos peleando mucho más de lo que ya estamos y si quieres que lo solucionemos, mejor hablamos otro día cuando tú y yo estemos sobrios y por sobre todo me quieras contar toda la verdad, por ahora si no quieres empeorar las cosas no me busques y vuelve con tus amigos, o vete a tu casa o haz lo que quieras, pero deja que me vaya – termine de decir
- Pero ¿estamos bien? – pregunto
- No sé, eso se lo dejo a tu conciencia, chao Enrique, quizás mañana hablamos – dije para irme. Él no me impidió que me fuera, se quedó parado donde estaba, solo observando cómo me iba. Tome el metro sintiéndome pésimo, tenía miles de dudas en mi cabeza y esperaba que una junta muy improvisada con mis amigas me ayudara de algo

Llegue a su casa con ganas de llorar, me sentía triste y cansado tanto física como psicológicamente, desde que tome el metro hasta que llegue a la casa de la Cote recibí al menos 20 llamadas del Kike, la cuales no conteste y varios WhatsApp preguntándome donde estaba o que por favor contestara.

Le mande un mensaje diciéndole a mi mamá que ya había llegado a la fiesta, pero nunca paso, la cote me dijo que me quedara en su casa y eso pensaba hacer.

A penas estuvimos cómodos les conté todo lo que pasó, desde el principio y en como poco a poco mi tarde – noche fue empeorando de a poco, ellas solo me escuchaban, sin decir nada, solo brindándome su apoyo. (La Andrea igual fue, la Cote le avisó).

- hay amiguito, no sé que decir, me caía tan bien el Kike, se vía tan bueno y por cómo te miraba se cachaba de una que te quería, esperemos que todo sean suposiciones porque si no entre las dos lo matamos – dijo la cote
- Si amigo, ahora desahógate, que ha sido una tarde para el olvido – comento Andrea.
- Gracias amigas -  dije

Mi celular volvió a sonar, no quería contestar, así que se lo pase a la cote para que hablara por mí, yo había tenido suficiente por hoy.

- hola, soy la Cotte la amiga del Camilo, el no quiere hablar contigo, así que puedes hablar mañana con él con más calma – dijo, escucho un momento para volver a responder – no, no estamos en su casa, estamos en la mía – dijo ella – no puedes venir, mi amigo no te quiere ver ahora, es mejor que vayas a tu casa y mañana hablen, hazme caso, lo conozco hace más años que tú, si vienes solo vas a empeorar las cosas – la cote suspiro – está bien yo le diré, adiós.

La cote me devolvió mi celular, estaba seria, pero estaba claro que quería decir algo.

- Dios, que porfiado es ese niño, al menos se nota que está arrepentido, ya iba en camino a tu casa a buscarte y casi viene para acá, espero que solucionen esto, se nota que se quieren harto amigo, que le sirva de lección.


El día no había sido muy bueno, así que me fui a acostar, estaba hecho polvo, no sé cómo pueden cambiar las cosas de un momento a otro, por ahora prefería creer en que se avecinarían tiempos mejores y si las cosas estaban hechas para que mi futuro sea con el Kike todo se arreglaría o de lo contrario prefería que todo terminara ahora, para así evitar un dolor más fuerte.


*********

Hola a todos :)

Nos volvemos a leer, público este segundo capitulo que marca mi regreso de la muerte jajajajajaajaja :)
Saludos a todos 
Nos leemos próximamente bellos 

16 comentarios:

  1. El mejor regreso de la muerte !! jajajaja
    que bueno que dejaste las cosas claras con césar y kike, súper valiente!
    no me demoré nada en leer los dos capítulos jejeje
    cuídate camilo! cariños
    Ro3l

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  2. Woooooo!!!
    Heavy todo! Un carrusel de emociones y tristezas.
    Cómo te he comentado Camilo, lo que me interesa es que estés bien y tranquilo, así sea que estés soltero o junto a alguien.

    Así como te deje la pista 8 de i grupo favorito, ahora te dejo el primer cortometraje que este grupo favorito mío hizo hace poquito. Ojalá lo disfrutes, habla de la violencia en el amor y de una relación que no se concretó... disfrútalo y un abrazo gigante para ti

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    1. He aquí los vídeos

      https://m.youtube.com/watch?v=Wha_8ECtFwI

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    2. Muchas gracias
      lo veré de inmediato
      y mil gracias por siempre estar leyendo y comentando
      saludos :)

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  3. Negra quedé wn!! Yo por menos que eso una vez le solté una cachetada a un ofrecido ql (súper yegua, pero considéralo wn... Fue muy liberador) esperaré el próximo :)

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    1. JAJAJAJAJA una cachetada? Qué nivel!

      att: el colombiano

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    2. yo terminé una amistad con un weon que venía desde pre kinder a 4to medio por ser un ofrecido qlo, a mí nadie me viene a pelliscar la uva ctm jaja

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    3. Sabios consejos niños, lo tendré en cuanta, pero yo soy mas de combos que cachetadas, tengo hermanos mas chicos y cuando eramos mas pequeños me sirvieron de entrenamiento jajajaja
      Saludos a todos :)

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  4. Uff, sentí la adrenalina de cuanto estabas hablando con Cesar, qué locura salirse de la zona de confort, y aunque no eras tú quien debía decir las cosas, te aplaudo por agarrar el toro por los cuernos. Me encantó el capítulo, obvio jajaja. Abrazos y mis mejores deseos Camilin, desde Colombia

    att: el colombiano

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    1. muchas gracias por siempre comentar y darme tu opinión es muy bueno para mi leerla y la de todos
      saludos :)

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  5. por la csm no falta la cola qla maraca callampibora que le gusta meterse en las relaciones xd

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    1. si
      las odio
      son las peores
      cero respeto con el genero
      les deseo lo peors jajajajaja
      Saludos :)

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  6. Como miembro de los wns malos q escupen veneno, creo que lo que decía el César puede ser verdad, la gracia de ser ruin y escupir ponzoña es tener harta información y que sea real, soltandola de a poquito pa ver como transcurre la situación a favor. Te pasaste, el capítulo súper bueno, me supiste tranmitir la rabia del momento del enfrentamiento y la tristeza de cuando todo había pasado. Porfa pronto el próximo capítulo y Te quiero ε>

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    1. Gracias :)
      ire publicando mas rapidos, pero se me habia olvidado responder los comentarios jajaja asi que en eso estoy ahora :)
      saludos

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Capitulo I - Tentación

Capítulo 1 – Tentación Felipe Sebastián Claudio Tres nombres que trataba de evitar, tres personas que hacían querer desaparecer ...