viernes, 15 de marzo de 2019

Capitulo I - Tentación


Capítulo 1 – Tentación

Felipe
Sebastián
Claudio
Tres nombres que trataba de evitar, tres personas que hacían querer desaparecer de Santiago a cualquier otra parte del mundo no entendía porque el corazón y mi cabeza se alineaban mirando en dirección de las personas equivocadas, tenia mas que claro que enamorarse de un heterosexual era complicado y debería saberlo por las múltiples ocasiones que salí quemado al jugar con fuego.
Los días de descanso que me tomé en el sur fueron sin duda sanidad a mi cuerpo y alma, eliminé todas las redes sociales de mi celular solo para no pescar a nadie y a mis cercanos les dije que en caso de cualquier emergencia me llamaran, que sería la única forma de contactarme.
Quería evitar que Claudio me contactara de alguna forma, ya sea por facebook, Instagram o whatsapp, tampoco quería ver las fotos del viaje del Seba y menos hablar con él, sentía mucho lo que me había hecho, y me prometí a mi mismo no hablarle, ni buscarlo, esperando que el se diera cuenta que me había echo daño.
Los paseos por el campo se hicieron parte de mi rutina, tener metros y metros de pasto con el viento guiándome, hacían la locación perfecta para pensar y redefinir rumbos en la vida, pero llegue a la conclusión que cada vez que planeaba que hacer, todo salía mal, así que opté simplemente por improvisar, me dejaría guiar y sorprender por el curso del destino, ya estaba cansándome de batallar constantemente contra todo, simplemente dejaría que las cosas pasaran.

--.---.--.--.--.--.--.--.--.--.--.--.--.--.--

Cuando volví a Santiago sentía un peso menos en mis hombros, una carga que no sabia que acumulaba, esperaba que la sensación de paz no terminara nunca, si hubiera sabido que desde ese punto las cosas tomarían causes muy distintos a los que alguna vez pensé jamás hubiera vuelto, quedándome en el confort de la casa del sur. Pero no fue así.
Las primeras semanas fueron muy en calma, ignoré los mensajes de Claudio tanto como pude hacerlo, pero tras tanta insistencia de su parte, terminé cediendo, si me preguntan hoy día porque fue, la verdad es que ni yo lo tengo muy claro. La conversación sería en un parque en la tarde después que saliera de clases, en quinta normal para ser más exacto, quedaba bastante cerca de mi universidad, pero no tan cerca de su casa, pero aun así accedió, bajo mi parecer era lo suficientemente neutro y publico para tener una conversación relajada (eso esperaba).
El día del encuentro salí unos minutos más tarde de mi ultima clase, pero aun así no me apuré, cuando llegue al metro que sería donde nos juntaríamos, él ya estaba esperándome, mas guapo de lo que lo recordaba, muy pocas veces lo había visto sin su polera de Huawei, solo para el carrete donde todo comenzó, pero ahora simplemente se veía muy… rico. No entendía cómo alguien como él quería experimentar conmigo, que bajo mis propios ojos me sentía tan común y mas ese día que me veía horrible, con cara de trasnoche.
- Hola – Le dije estirándole la mano para saludarlo, con una sonrisa en mi cara, que si fue sincera
- Hola Camilo – dijo aceptándola y sorprendiéndome con un abrazo – ha pasado harto tiempo sin vernos – remató
- Si, harto tiempo – concordé
- Te escapaste por hartos días – rio
- No estaba en Santiago – fue todo lo que comenté

Conversando acerca de lo que habían sido nuestros días caminamos en busca de algún lugar donde poder sentarnos, no había mucha gente en parque, solo un par de niños jugando y parejas sentadas en bancas. Tras caminar un poco encontramos un lugar en el pasto perfecto para pasar la tarde.
- Toma – dije entregándole unas galletas que tenia en la mochila
- Que eres tierno, no tenias que traerme nada – dijo tomando mi acto como un detalle que significaba mucho mas de lo que quise decir
- No te traía nada – reí – solo la tenia en mi mochila y pensé que quizás querías galletas
- Bueno, sí quiero galletas – reconoció – es bueno verte Camilo, pensé que jamás te volvería a ver y aunque no me creas me caíste super bien, al igual que a todos los chiquillos en la tienda, cuando te fuiste de la nada todos quedaron igual sentidos, porque ni te despediste – comentó y sabia que tenia razón, todos se portaron super bien conmigo, jamás me trataron mal, aun siendo todos super machitos y yo me reconocí como gay con ellos, fácilmente podían haberme dejado de lado y no volver a hablarme, pero al contrario, ellos hasta me invitaron a su grupo y a carretear como uno mas de sus mejores amigos.
- Si es verdad, no lo había pensado, prometo ir este fin de semana solo a verlos a todos, para decirle chao como corresponde, pero me dio la locura y simplemente me fui – reconocí
- Además tu reemplazante es una niña muy linda pero no muy simpática – dijo
- Es que la simpatía solo la tenemos pocas personas, y en Huawei tampoco la conocían – dije riendo
- Como eres – dijo el con una sonrisa en su cara – no seré simpático, pero tampoco me arranco sin siquiera despedirme
- Ya, si te dije que lo sentía, además era solo una broma – comenté
- Camilo, no me quiero hacer mas el tonto, lo he pensado caleta, aunque no me creas, llevo hartos días sin sacarte de mi cabeza, esto me tiene muy confundido, no porque solo piense en las cosas que hemos hecho sino que también, en el poco tiempo que compartimos hacías que me riera mucho, y lo mejor es que no te das cuenta de lo gran persona que eres, por eso haces dudar a cualquiera – dijo, por mi parte estaba serio, de un momento a otro la atmosfera relajada que habíamos construido se desvaneció.
- Claudio, no se si quiero hablar de esto ahora – dije
- Puede que tu no, pero yo si Camilo – reconoció – de verdad que esto me esta afectando, te busco a diario en Instagram, te psicopateo en Facebook y me pregunto si a lo mejor haces lo que hiciste conmigo con otros hombres y me paso miles de rollos, si tu idea fue joderme la cabeza creo que lo lograste… - no lo dejé continuar
- Como que yo te jodí la cabeza Claudio, no me digas eso a mí, yo no te he buscado, ni siquiera quise que mas cosas siguieran pasando, eras tu el que me busco después de todo – enfatice
- Si, pero no podía evitar caer en la duda, sobre todo después del carrete con lo que me dijiste y lo que hicimos que me gustó mucho, por eso camilo no puedo evitar querer más de ti – dijo
- que te dije en el carrete – consulté sin querer saber esa respuesta
- Me dijiste que probara contigo, que no me arrepentiría, que siempre iba a estar con la duda si es que no me atrevía y fuiste muy convincente - mencionó
- Estaba muy ebrio Claudio, que vergüenza, jamás debiste escucharme – dije
- Pero lo hice y aquí estoy como tonto – dijo pasándose una mano por el pelo – aun tengo el video – agregó
- Yo igual – dije mirando el pasto que había arrancado con mis manos
- Y ¿lo ves? – preguntó – porque yo lo veo casi siempre – dijo
- Casi nunca – respondí, lo cual era verdad solo lo vi un par de veces.
- Y has pensado en mi – preguntó y pensé en mentir, pero la verdad como había pensado antes no quería seguir planeando nada, todo fluiría de aquí en adelante
- Si – reconocí, pero sin mirarlo, era inevitable con todo lo que insistía en hablar conmigo, no se lo dije, pero lo pensé.
- Me parece – fue todo lo que dijo - ¿Quieres un jugo? – consultó
- Sí, pero no creo que andes trayendo alguno por ahí – dije, haciendo referencia a como yo había sacado la galleta de la mochila y el no traía nada consigo.
- No, pero ya vengo – dijo
Lo observé como caminaba hasta un carrito donde estaban vendiendo jugos naturales. Al lado del Claudio, extrañamente no me sentía incomodo, más bien sentía que podía ser yo sin miedo a que el me juzgara, además constantemente me decía cosas simpáticas, quizás era solo su técnica de conquista, pero si era así, le funcionaba bastante bien, sin embargo, seguía sabiendo sus reales intenciones y eso podría una cierta distancia de mi parte, no podría jugar un juego tan arriesgado otra vez y pensaba comentárselo hoy mismo.
Tras unos minutos, el regresó con dos vasos de jugo, uno de lo que supuse piña y el otro frutilla.
- No se cual te gusta más, así que traje uno de piña y otro de frambuesa – casi le había achuntado – a mi me gustan ambos, así que dime cual quieres – consultó
- Piña – dije – es mi favorito – agregué
- Genial, porque me gusta mas el de frambuesa – dijo riendo, bebí un poco del rico y helado jugo, para volver a nuestro tema de conversación, sería directo con él.
- Claudio, ni yo mismo se porque lo hice, si te soy sincero mi vida es un desastre, ya una vez te había dicho que había pasado por un par de relaciones un tanto raras, y no creo pueda con algo como lo que quieres, me conozco lo suficiente como para saber que no quiero mas confusiones en mi vida, tu eres alguien muy lindo, por dentro y por fuera, un peligro para mí, además tienes polola Claudio, no quisiera entrometerme en eso – dije
- Entiendo lo que me dices y agradezco tu sinceridad, pero para mi ya es tarde, ahora tengo un bichito en la cabeza que me hace querer probar, aunque sea una vez – dijo, y lo serio y confundido que me hace verlo, dispara toda la culpa, yo solito instale eso en el y quizá debía corregirlo.
- Me siento fatal – dije – tu solo quieres probar ¿no es así?
- Sí, solo una vez – dijo convencido
- Solo una – dije afirmando – ¿lo prometes? – añadí
- Si, lo prometo – confirmó
- Entonces, está bien, no sé qué estoy haciendo Claudio, esto contradice todo lo que mi mente me dice que haga, pero a decir verdad tampoco es como si fuéramos a tener una relación después – dije
- No para nada – el rió de mi comentario
Tal cual fuera un negocio, acordamos una fecha, hora y lugar, como mi casa ya no estaba sola, y la de el tampoco, quedó en pedir prestado el auto de su papá e iríamos a un motel, lo pagaríamos a media y sería toda una noche. Aun no me convencía de que, hacia lo correcto, pero a quien engañaba, la calentura y tentación pudieron más, ya no solo lo hacia por que el me lo pedía, sino que, también era porque tenía ganas de estar con él.
Seguimos conversando el resto de la tarde de muchas otras cosas, de su familia, de la mía, nuestro futuro y que pensábamos hacer mas adelante, el tiempo se nos pasó volando, y cuando fuimos plenamente conscientes de nuestro entorno, ya estaba oscureciendo, así que ambos caminamos al metro para irnos.
No vivíamos en direcciones muy distintas, así que gran parte de nuestro trayecto a casa o hicimos juntos. Cuando nos tuvimos que separar nos volvimos a recordar a qué hora nos juntaríamos el viernes de esa semana.

--.---.--.--.--.--.--.--.--.--.--.--.--.--.--

El viernes llegó mas rápido de lo que pensé, durante esos días hable a diario con Claudio por whatsapp por si él se arrepentía, pero nada de eso ocurrió, ese día no fui a clases y aprovechando la soledad de mi casa me arregle desde muy temprano, como había pasado días sin ningún tipo de actividad, no me había depilado y lo mas probable era que tuviera mas vello del que pensaba, así que me depilé por completo, cuando terminé de hacerlo me sentí como un bebé nuevamente.
A medida que la hora de nuestro encuentro se acercaba, más nervioso me ponía, cuando estaba por salir mi celular vibró, era un mensaje de su parte avisándome que se había atrasado, pero que no me preocupara, que él me pasaría a buscar directamente a mi casa.
Estaba solo con mis hermanos ya que mi mamá hacia horas extras en el trabajo cuando siento la bocina del auto avisándome que ya había llegado, cerrando la puerta de mi casa vi a Claudio mirándome desde la calle montado en su auto (el del papá para ser mas exacto), iba a cruzar la calle cuando veo caminando a mi mamá.
- ¿Dónde vas? – quiso saber
- Mamá, te avise hace días que hoy saldría con un amigo – dije
- Verdad, se me había olvidado hijo – reconoció
- Si y me está esperando – dije besándola en la mejilla
- Cuídate hijo y dale saludos a tu amigo – respondió

Alejándome de ella subí al auto en el asiento del copiloto

- Un poco tarde, pero llegué – dijo Claudio – ¿Como estas? – consultó
- Bien y tu – respondí
- Ansioso – dijo – así que vámonos luego – dijo
- Mi mamá te mandó saludos – dije riendo
- Así que ya me quiere la suegra – bromeó, a lo que le di un golpe en el brazo – era solo una broma, si será solo mi suegra de una noche – dijo esto ultimo con un tono cargado de erotismo
Sin responder nada, solo afirme incapaz de negarlo, la atmosfera dentro del auto se cargó de excitación, no podía dejar de sentirme nervioso, era como un niño de quince años haciendo algo prohibido.
Claudio manejó comentándome como había estado su día, me dijo que se había demorado un poco mas porque sus viejos no habían llegado aún y había tenido un problema con su polola, a la que le había dicho que saldría con unos amigos, no quise preguntar más, aun me sentía un poco mal por ella, sin duda no se merecía esto.
Llegamos a un motel, el cual estaba bastante lejos de donde vivíamos, por lo que era difícil encontrarnos a alguien conocido, entramos en el auto lo cual hizo que todo fuera aún más privado, además como se repartían en cabañas hacia que el momento de intimidad fuera mayor. Ambos nos bajamos y entramos, una vez que cerramos la puerta una llamada telefónica me sobresaltó, lo que provocó que él riera a la par que contestaba, era la gente de recepción preguntando si queríamos algo y para concretar el pago. Mientras que Claudio se encargaba de todo me senté en la amplia cama de la habitación, era bastante cómoda, las luces eran tenues y se podían controlar para dar la oscuridad o claridad necesaria según lo quisiéramos.
- Todo listo – comentó Claudio
- Genial – respondí sin saber que decir
- Toda nuestra esta habitación hasta mañana – dijo riendo – así que tenemos toda la noche
- Buena – acoté, no sabía porque me sentía nervioso, era incapaz de decir mas de una palabra – Estoy nervioso – reconocí
- Yo también – dijo – caleta para serte sincero – se sentó al lado mío
- Si quieres podemos comenzar – dije mirándolo
- Si, pero primero quiero que nos relajemos – comentó – mira hagamos algo y así no se siente como si fuera un tramite todo esto, no es como lo quiero recordar – mencionó
Claudio camino hasta el equipo de música, presionó play y comenzó a sonar una canción romántica, de Chayanne para ser exacto.
- Era lo que había – dijo riendo – ven bailemos – me tendió su mano para que la tomará, a lo que me reí, jamás me lo hubiera imaginado como un bailarín, pero era música lenta así que grandes pasos de baile no haríamos, aunque con mi perreo intenso, lo hubiera dejado impactado.
- No bailo muy bien – comenté sabiendo que curado lo dejaba todo en la pista vuelto loco, pero mientras el no lo supiera no había problema
- yo tampoco, pero así rompemos aún más el hielo – dijo
Levantándome tome su mano, pero quería que todo fuera aún más erótico e íntimo, así que me separé de el para bajar aun mas la luz, la cual ahora era mucho mas tenue, estaba oscuro pero no tanto para poder diferenciarnos, volví a donde el me esperaba y lo abrace, tal cual lo hace una pareja, nos movimos al son de la canción, sus manos pasaron a tocar mi espalda y hacer un recorrido perverso hasta mi trasero, al cual acaricio sin ser feroz.
- Hueles muy rico camilo – dijo – quiero que te relajes, que nos dejemos llevar, quiero probar muchas cosas y tenemos toda la noche para eso, así que pasémoslo bien – dijo muy suave a mi oído, lo que provocó una corriente hacia todo mi cuerpo, se me erizaron todos los vellos del cuerpo. Luego dejo un beso en mi cuello, un lugar muy sensible.
- Esta bien – dije – y yo quiero partir haciendo algo – comente con mis ojos cerrados
- Bueno – fue todo lo que dijo
Pasando mis brazos por su cuello, me obligue a mirarlo mientras levantaba mi cabeza que estaba en su pecho, sin dudarlo me acerqué para besarlo, creí por un instante que me correría la cara, pero no fue así, respondió con igual intensidad, su lengua jugaba con la mía, sin duda una gran beso, el cual se intensifico, solo nos separamos para tomar un poco de aire, pero a penas nuestros pulmones recobraron oxigeno volvimos a unir nuestros labios, era como una batalla que nuestros labios libraban, mis dedos jugaban con su pelo, tirándoselo mientras juntaba mas nuestras bocas, por su parte, sus manos dejaron de ser gentiles y ahora amasaban mi trasero. Podía sentir la erección de Claudio a través de su pantalón, sin poder evitarlo bajé una de mis manos para tocarlo, poder sentirlo, pero el tomó mi mano y sin tenerlo previsto me giró, quedando ahora de espalda a él.
- No seas ansioso bebé – me dijo con su tono cargado de excitación.
Ahora sus caderas se movían suavemente, permitiendo sentir su erección en mi culo, su boca ahora se había trasladado a mi cuello besándolo con ansias y de vez en cuando dejar uno que otro mordisco, mi excitación solo creció y no podía evitar jadear con cada movimiento de su parte.
- Eso bebé, así te quería tener – dijo – deseando que haga contigo lo que yo quiera – susurro en mi oído
- Si – dije muy excitado
Sin que el pudiera reaccionar me volví a girar para reclamar sus labios otra vez, sentía que su barba picaba un poco, pero no me importaba en lo absoluto, y con cada acometida sentía mas hinchados mis labios.
- no se como no voy a querer más de esto – dijo separándose de mi
Quería más contacto físico, quería sentir su calor, así que logre sacar su camisa que lo hacia ver tan guapo, el por su parte quitó mi polera, si hay una parte de mi cuerpo donde soy sensible es en mis pezones, y al parecer él lo descubrió inmediatamente, porque los lamió y chupo sin compasión, yo quería gritar, pero me contuve y solo gemía desenfrenado.
La pasión podía más conmigo, estaba fuera de control como muy pocas veces lo había estado, estaba entregado por completo, no sé cómo había llegado a ser así, si tenía clara una cosa, Claudio me tenía completamente loco. No opuse resistencia alguna a que me quitara el pantalón dejándome solo en mi bóxer, sin poder evitarlo más me dejé caer de rodillas frente a él sin apartar los ojos de su mirada. Comencé a desabrochar su pantalón sin dejar de besar su abdomen que tenia algo de bello y hacia que me encantara aún más. Una vez que su pantalón yacía en el suelo, notando su prominente bulto en su bóxer negro no pude evitar jugar con este por sobre la tela, besándolo y dando pequeñas mordidas juguetonas que lo hacían estremecerse, el por su parte tomo mi cabeza aplastándome contra su erección. Sentir su aroma me enloquecía, así que a penas me soltó bajé su ropa interior y frente a mi rebotando quedo su pene, era mucho mas grande y cabezón de lo que se podía ver en el video, pero cuando digo cabezón es cabezón, ya que sin exagerar me cabía justo en la boca. Ayudándome de mis dos manos jugué con él, lamiendo y besando su glande, intenté en varias ocasiones metérmelo entero en la boca, aunque fuera casi imposible y las arcadas venían de vez en cuando, pero el parecía extasiado cuando chocaba su pene con mi garganta.
- Lo chupas tan rico camilo, la mejor mamada de mi vida – decía y me alentaba a seguir
Sin perder tiempo continúe lamiendo y chupando toda su verga, de manera muy sexy (o lo que quería lograr), lamí sus testículos, metiéndomelos en la boca, dejando su pene sobre mi cara, el cual la cubría por completo, eso pareció gustarle.
- O que rico te vez, déjame sacarte una foto camilo, así después la vez igual y miras lo rico que te vez – solo asentí extasiado por el momento.
Vi como desde el bolsillo de su pantalón sacaba su celular, me mantuve en la posición hasta que el sacó la foto. Tras eso, queriendo más de él, me levanté, y aunque pensaba que ya no me besaría mas tras todo el sexo oral que le di, me sorprendo con un beso apasionado.
- juguemos con ese culo tan grande que tienes – dijo guiándome hasta la cama
Sin dudarlo me puse en cuatro a una orilla de la cama, él se paró atrás mío, rápidamente bajo mi ropa interior, dejándome totalmente expuesto para él. Sentí como ponía su pene entre mis nalgas y me daba ligeros golpes con él, por dentro ardía de deseo de que entrara luego en mí. Por unos instantes perdí su contacto y por la posición en la que estaba no sabia que estaba haciendo, pero luego sentí su cómo devoraba mi culo con pasión, dándome una nalgada que no hizo mas que avivar mi fuego interno.
- tienes la media raja, igual que una mina camilo – dijo para luego volver a lamer mi culo – no, mucho mejor – repuso nalgueándome
- y esta noche es todo tuyo mi culo – dije extasiado
- Me tienes mas caliente que nunca – reconoció – te lo pondría así mismo sin condón – un poco de cordura me quedaba
- ¿No trajiste? Por que yo tengo uno – dije
- Tranquilo, si traje, me lo pongo altiro – se alejó
No mentiré que sentía algo de miedo, el tamaño de Claudio eran palabras mayores, pero la calentura del momento me superaba. Vi cómo se ponía el condón, en lo que para mi fue una eternidad, luego parándose atrás mío sentí como presionaba para entrar en mi culito. Costo bastante, pero una vez que estuvo por completo dentro de mi no pude evitar medio gritar y gemir, sentía un dolor y ardor intenso, estaba por retractarme y pedirle que saliera.
- ¿te dolió? – preguntó acercando su boca a mi oído
- Si – dije entre jadeo
- Lo dejaré un ratito adentro para que te acostumbres – dijo – quiero puro moverme, tienes el culo muy apretado – dijo mientras masajeaba mis nalgas
Cuando ya sentí que dolía menos, lo insté a que se moviera, y el sin perder tiempo lo hizo, no podía evitar sentir algo de dolor, pero a medida que sus penetraciones fueros más rápidas y duras algo dentro mío se comenzó a construir, algo que no quería parar de sentir, un cosquilleo intenso que pedía más. Literalmente me dedique a morder la almohada por el frenesí del momento, las nalgadas que me daba solo prendían mis ganas de seguir. Repentinamente Claudio salió de mi interior, dejándome vacío y con ganas de más.
- Cambiemos – dijo nalgueándome
- Como me quieres – respondí
- Acuéstate mirando el techo y pone tus piernas acá – dijo tocando sus hombros
Sin rechistar hice lo que me pidió, el guio su dura erección otra vez a mi entrada, para lentamente abrirse paso lentamente, esta vez la sensación de placer fue mayor y sentía que llegaba mas adentro, sus caderas dieron movimientos circulares que me hacían gemir como un loco, tenia los ojos cerrados por la intensidad del momento, pero cuando los abrí pude ver su cara llena de sudor y excitación, sin dudarlo acerque como pude mi cara a la suya para besarlo, acto que el no evitó y solo disfruto.
Estuvimos de esa manera lo que para mi fue una eternidad, hasta que de forma inminente sentí un orgasmo magnifico, fue tan intenso que apenas podía respirar, Claudio sin dejar de moverse hizo que todo se sintiera muy intenso, agotado apenas podía moverme, por su parte el seguía con sus estocadas, hasta que comenzó un ritmo frenético que indicaba que estaba por llegar, y así fue, como sus gemidos tan de macho me avisaron que había acabado, juntando su frente a la mía, sentía su pesada respiración y solo me dedique a abrazarlo y acariciarle su espalda tan ancha cubierta por una capa de sudor que hacia que todo lo vivido se sintiera aun mas real.
- Fue muy rico – dijo
- Ni que lo digas – comenté
El se levantó para quitarse el condón, yo incapaz de hacer cualquier acción me quede tirado en la cama, donde el enseguida se recostó a mi lado.
- Mejor de lo que esperé Camilo, sin duda eres muy bueno para la cama – me dijo a lo que reí
- Gracias por el alago – dije – tu igual lo eres, bastante para ser sincero – terminé.
Incapaces de nada solo disfrutamos de nuestra mutua compañía, escuchando la música aleatoria presente que recién fui consciente que nunca paro de sonar, ahora se escuchaba como Camila tocaba su icónico coleccionista de canciones.
- De donde sacaste toda esa música – quise saber
- No se – respondió – era un CD que había ahí encima, por un minuto pensé que era una película porno – dijo riendo
Claudio se acomodó en la cama completamente desnudo, al igual que yo, y sin poder evitarlo ignorando el sudor de nuestros cuerpos, me acomodé en su pecho, el paso su brazo por debajo de mi cabeza para acercarme mas a él.
- Me gusta este Camilo – dijo con su voz mas perezosa
- ¿Cuál Camilo? – quise saber
- Este Camilo mas cariñoso y tierno – dijo acariciando mi espalda, lo cual inevitablemente me relajó.
- Siempre soy igual – repuse
- Conmigo no – respondió – y me gusta que seas así de atento conmigo, solo una vez antes lo has sido, cuando me quede en tu casa, y ahora, pero más ahora – rio – deberías serlo siempre, no me quejaría
- Entonces si en la calle te abrazara y besara te gustaría – dije riendo
- Si, porque no – se rio
- Estas loco y muy mentiroso – dije acariciando los vellos de su pecho
- Después de esto Camilo no se si quiera dejar de verte – comentó
- Lo prometimos, seria solo esta noche Claudio – Repuse pensativo, porque a decir verdad quería más de estas noches en mi vida.
- No diré nada, porque tengo toda esta noche para convencerte bebé – dijo depositando un beso en mi cabeza
- Y después soy yo el tierno – lo moleste y el se carcajeo
- Si, pero no se lo digas a nadie, ya que solo estoy haciendo esta excepción por ti – dijo trasladando su mano peligrosamente a mi trasero que aún no se reponía de tan grandioso asalto que había sufrido. Mirando hacia su delicioso pene, pude ver como este cobraba vida nuevamente.
- Parece que alguien quiere más – dije tomando su pene entre mis manos
- es que de solo tocarte me dan ganas altiro – respondió sin dejar de acariciar me trasero
- Aun estoy adolorido – reconocí
- Te traté muy duro Bebé – quiso saber
- Si, pero me gustó – dije – pero mientras que me recupero podría masturbarte y chupártela – ofrecí, provocando su risa
- Un magnifico acuerdo que acepto encantado, con lo rico que lo chupas – dijo
Sin dudarlo comencé a mover mi mano por toda su longitud, su respiración inmediatamente se intensificó, apretando un poco más pude notar como una gota de líquido preseminal salía, el cual ocupé para esparcir sobre su glande y de esa manera estimularlo aún más.
- Dame un beso camilo, que besas muy rico – dijo, casi suplicando, lo que no era necesario, dado que encantado lo haría.
Mientras nuestros labios se reencontraban no paré de darle atenciones a su pene, seguí con ese ritmo hasta que mi brazo fatigado comenzó a doler, de fondo comenzó a sonar Crazy de Aerosmith y sintiéndome sexy me impulsé a cambiar de posición y chupárselo como nunca.
Me acomodé entre sus piernas para chupárselo mas a gusto, sin ningún juego previo metí todo lo que pudiera de su pene a mi boca lo más profundo que podía, vi como cerró los ojos dejándose llevar por el placer, para luego tirar su cabeza hacia atrás, liberé su erección para buscar aire, sin dejar de mover mis manos estimulándolo, repetí mi acción, solo que esta vez el me sujetó por la nuca forzando a que lo tomara mas profundo, y cuando notó que había llegado a mi limite comenzó a mover sus caderas como follando mi boca, las arcadas parecían excitarlo aun mas por lo que no me libero, hasta que con mas fuerza me liberé de su agarre, las lágrimas salían por instinto, el mirándome con sus dedos enjuago algunas de ellas que corrían por mis mejillas
- no sabes lo loco que me estas volviendo Camilo – dijo jadeante
Esta vez incapaz de metérmelo completamente en la boca, jugué con sus testículos, lamiéndolos mientras lo masturbaba, luego subí nuevamente para comerme su glande rosado, el extasiado no paraba de mover sus caderas en busca de más.
- párate – dije y el me hizo caso, mientras yo me recostaba en la cama mirando el techo y dejando mi cabeza en la orilla de la cama, había visto esa posición antes y quería replicarla – follame la boca Claudio – dije
El sin dudarlo metió su pene entre mis labios, ahora era el quien tenia el control, y moviendo sus caderas fue duro, en momentos apenas podía respirar, pero notaba que a él le gustaba, su ritmo incrementó, por lo que sabia que en cualquier segundo acabaría y así me lo hizo saber
- Camilo, me voy – dijo
Acomodándome rápidamente me puse frente a el para ver como se masturbaba y sin pensarlo me lo metí nuevamente en la boca, sus quejidos delataban que ya había llegado y así lo sentí cuando percibí su semen en mi lengua, lo saqué un instante y un chorro bañó mi cara, miré el rostro contraído de Claudio mientras los espasmos del orgasmo aun estaban presentes en él. Moví mi mano por su pene hasta sacar la última gota de su semen, el me miró mientras el semen que tenia en mi cara lo metí nuevamente en mi boca.
- Cuando pensé que no me podías gustar mas Camilo, me haces esto, cachay que nunca voy a olvidar como te comiste toda mi leche – dijo tirándose a la cama estrepitosamente a lo que yo reí – ven acá dijo llamándome a su lado a lo que negué con mi cabeza
- No, necesito ir al baño – comenté para luego ir a la mesita donde Claudio había dejado un jugo que nos habían traído de cortesía para cada uno y así poder beber un poco para enjuagar mi boca.
Aprovechando su momento de descanso entre al baño a refrescarme y lavar mi cara, cuando volví Claudio seguía igual como había estado. Me acomodé a su lado y el al sentir mi presencia quedó mirándome de frente
- Quiero saber mas cosas de ti – dijo
- Bueno, pregunta, creo que tenemos muchas horas por delante aún – comenté
- Tienes mas amigos como yo – pregunto
- Como mas amigos como tu – Quise saber
- Si po, mas gente con los que haces estas cosas – repuso
- Quieres la verdad o la mentira – dije
- La verdad – contestó
- Si, solo uno, nada de gente, solo una persona – dije
- y de hace cuanto – volvió a consultar
- Hace tiempo – dije – pero hemos tenido muchas pausas – mencioné
- ¿Cómo pausas? – contraatacó
- No nos vemos siempre, solo pocas veces, hay periodos que no nos vemos durante meses, pero bueno, no es como si fuera una relación, con el Seba siempre hemos sido cercanos, pero tampoco lo nuestro tiene un nombre, solo amigos – dije
- Así que Seba – dijo pensativo – Y que tiene el que yo no tenga para hacer de esto más seguido – preguntó
- Polola – respondí, sabiendo que igual era mentira en parte, porque Seba siempre tenía alguien más, lo que realmente temía era enamorarme de Claudio.
- Es gay – Quiso saber ahora
- No es Gay – dije – pero es soltero – comenté
- Pero es secreto de todas maneras, nadie mas sabe aparte de yo por supuesto – afirmó
- Si, nadie más lo sabe – dije
- Entonces si lo nuestro fuera secreto, igual podría funcionar, no crees – dijo
- Claudio, es complicado – dije – creo que esa respuesta te la deberé y responderé en otro momento, no esta noche – agregué
- Entonces habrá otras – dijo con una sonrisa coqueta en su rostro
- Si, pero como amigos no habría problemas – reí también
- Eso lo veremos – dijo moviendo sus cejas seductoramente
Continuamos hablando de temas menos complicados, como los gustos de cada uno, lo que pensábamos hacer a futuro, el me contó que quería trabajar en lo que estudiaba y que estaba por terminar, por lo que me alegraba por él, además me comentó que ahora volvió a trabajar part time en el mall, dado que como estaba estudiando aún no quería descuidarlo (estudiaba ingeniería comercial), lo encontraba sin duda alguien muy maduro y es que a sus 25 años, tenia los pies muy puestos en la tierra.
- Camilo, tras todo lo que nos hemos podido conocer, tu ¿me tienes confianza? – quiso saber
- Después de todo lo que hemos hablado, la verdad es que si – dije
- Entonces me crees que no tengo nada raro – dijo
- ¿Cómo? – dije sin entender.
-  Ninguna enfermedad de transmisión sexual, ni sida, nada y a mi me consta que tú tampoco – dijo, lo cual era verdad no hace mucho me había echo el examen y no había tenido situaciones de riesgo por lo que estaba sano.
- Si yo tampoco tengo nada – dije
- Entonces ¿me dejarías hacértelo sin condón? – preguntó
- Pero Claudio ¿No te da miedo? – pregunté
- No, porque confió en que me dices la verdad y yo tampoco tengo nada, y tengo muchas ganas de ponértelo así nomas y acabar dentro de ti para marcarte como mío – dijo esto para luego besarme, sin duda fue injusto, usando esas armas no resistiría.
Sin poder evitarlo, nos dejamos llevar por nuestros instintos y sucumbí a lo que el me pidió, dejándolo hacer lo que quisiera conmigo, a cambio recibí un nuevo y grandioso orgasmo con un plus, ver la cara de satisfacción de Claudio, dejándolo exhausto por todo lo que habíamos echo hasta ese minuto.
Sin poder evitarlo a las 4 de la madrugada ambos nos dormimos, el tenía que trabajar al día siguiente, así que fijamos la alarma a las 7:30 de la mañana para llegar a tiempo a su casa y el pudiera cambiarse de ropa.
Despertamos por el estridente sonido de su alarma, él se acomodó dejándome sentir su erección mañanera mientras me abrazaba en posición cucharita, ambos estábamos desnudos, así que removiéndome en contra de su prominente pene, sentí como poco a poco hacia presión para entrar en mí, por la falta de lubricación el trabajo fue mayor, pero lo remedió él con un poco de su saliva. Yo aún adormilado gemí cuando entró en mi interior, no se muy bien cuantas acometidas dio, para luego acostarse sobre mi y martirizarme en esa posición, pero su orgasmo no tardó en llegar bañándome con su liberación.
- Buenos días – dije riendo
- Mas que buenos – dijo – ¿vamos a bañarnos? – consultó a lo que asentí
Ya sabrán que ocurrió en esa ducha, pero lo que no sabrán eran las ganas que tenia de detener el tiempo, Claudio había sido una gran compañía, más allá del plano sexual, si no también desde el punto de vista de amistad, me hizo pasar un excelente momento a su lado.
--.--.--.--.--.--.--.--.--.--.--.--.--.--.--.--.--.--.-.

Nos fuimos agotados ambos en su auto, me llevó primero a mi casa, prometiendo que hablaríamos, por dentro así lo quería, pero igual necesitaba un tiempo para pensar y aclararme, sentía que tenia un flechazo por el y eso era crítico.
Dentro de mi casa estaba todo silencioso, sospechaba que mi mamá se había ido al trabajo y mis hermanos aun dormían, sin poder evitarlo necesitaba otra ducha, y así lo hice para luego caer directo en mi cama, tenia que reponer sueño.

--.--.--.--.--.--.--.--.--.--.--.--.--.--.--.--.--.--.--.--.

Los días posteriores hable constantemente con Claudio por Whatsapp, Instagram y Facebbok, el solía comentarme todas las historias que subía a mi Instagram y yo las de él, a excepción en las que salía con su polola.
Mis amigos de siempre tenían planeado que un fin de semana fuéramos a acampar, lo que no rechacé, estaban todos muy emocionados y aprovechando un fin de semana largo concretaríamos lo que teníamos en mente, por lo mismo necesitábamos comprar algunas cosas, es así que nos juntaríamos un sábado en el mall para ver lo necesario y ahí mismo cotizar y comprar. Ese día llegaron mis infaltables amigas, así como varios ex compañeros entre ellos el Seba, con el que no había hablado mucho desde que había desertado de nuestro viaje.
Noté que en varias ocasiones quiso meterme conversa y yo como si nada le respondía super simpático y cordial como siempre, pero mostrando cierta reticencia hacia él, lo cual lo notó.
Todos coincidimos en que faltaba una carpa y en lo personal no tenia saco de dormir, así que fuimos a comprar, con mis amigos entramos a la tienda en la que trabajé y sin poder evitarlo fui a visitar a todos los chicos, mis amigas me acompañaron, así como el seba y otro amigo que querían ver un celular supuestamente.
Cuando ellos me vieron noté su alegría, lo que me reconfortó completamente, sin duda lo que decía el Claudio de que me había ido sin avisar les había golpeado
- Están bajando las estrellas parece – dijo el Mauri viéndome
- Parce tanto tiempo – dijo Héctor saludándome
- Vine a visitarlos – dije
Saludé a todos, inevitablemente busque con la mirada a Claudio, pero no lo veía, les presenté a mis amigos, mientras seguimos conversando, me decían que estaban todos super bien y que estaban planeando un nuevo asado y que estaba invitado, y por supuesto que no me negué, mis amigas no pasaron inadvertidas y vi como el Mauri miró a mi amiga la Cotte, no quise decir nada e incomodarlos, luego divisé al Claudio, así que me acerqué a él, para mi mala suerte conversaba con su polola, pero ellos ya me habían visto ir en su dirección y no me podía devolver.
- Hola Chiquillos ¿cómo están? – dije saludándolos a ambos
- Hola Camilo, machismo tiempo – dijo la polola de Claudio
- Si harto tiempo – Dijo él casi ignorándome
Conversamos un rato, hasta que llegó el Seba consultando por un celular y tuve que presentárselo
- El es mi amigo el Seba – dije – También ando con unas amigas, aproveche de venir y también para cachar donde están las cosas de camping
- En el tercer piso – respondió Camila
- Buena gracias, creo que me iré para seguir comprando, ojalá pillemos lo que buscamos – comuniqué
- Se van de camping – quiso saber Claudio, quien casi me hacia sentir como tonto por ir a saludarlo si a penas me miraba.
- Si – Respondió el Seba – El otro fin de semana como es largo lo vamos a aprovechar – sonrió
- Buena, un gusto verte – dijo la polola de Claudio
- Si – fue todo lo que dijo Claudio
- Gracias, espero volver a verlos pronto. Que estén bien – me despedí de ellos
Pasé por el lado de mis demás ex compañeros de trabajo y me despedí para poder comprar lo que necesitaba, no pude evitar la decepción de sentirme ignorado por el Claudio, me cargaba como era cuando estaba con su polola, pero no podía reclamar nada, ese era mi lugar y nada que hacer.

--.--.--.--.--.--.--.--.--.--.--.--.--.--.--.--.--.

En la tarde de ese mismo día mi celular vibro, era Claudio que había respondido una historia de Instagram que había subido con todos mis amigos comiendo en el mall.
- Rapidito me reemplazaste, que te vaya muy bien – dijo
No entendía en lo absoluto sus palabras, así que solo respondí con un “???” realmente no tenia ni idea de que le había ocurrido ahora a Claudio fue el quien ni siquiera me pescó en el mall y para escenitas no estaba.
Esperé una eternidad por su respuesta, pero nada llegó a si que me fui a duchar, el día había sido agotador y realmente quería descansar, y una buena ducha con agua tibia era lo que necesitaba, además habíamos caminado tanto que mis pies me estaban matando. Cuando volví tenia varios mensajes de Claudio devuelta
- Así que no veías casi nunca a tu “amigo” Seba y resulta que hasta a acampar van juntos, compartirán saco de dormir??? – fue su respuesta
- No creo que te deba esa explicación a ti Claudio, que raro eres – dije, no tuve que esperar mucho esta vez a su contestación
- Yo creía que si me debías esa respuesta, después de todo yo creo que fui solo un acostón y nada más – estaba en las nubes con sus respuestas y no de una buena manera, jamás creí que le había dado a entender mas cosas de las que el percibía realmente
- Claudio hoy ni me pescaste cuando estábamos hablando, y ahora me dices que estas celoso del Seba cuando no deberías, porque es mi amigo, jamás debí contarte nada, que rabia me da esta situación, porque tu tienes polola no debería importante lo que yo haga con mi vida – fui categórico
- pero me importa Camilo, no suelo acostarme con cualquiera, y pensé que lo habías notado… podemos hablar de esto en persona – quiso saber
- No, no hay forma – dije
- Iré igual – comentó
- No estaré, saldré con mis amigos – mentí
- Entonces te esperaré, incluso puedo hacer la hora con tu mamá, no me complico la vida ;) – maldito, lo odié
- Esta bien, pero no te pases, que ya me pusiste de mal humor – respondí, lo peor de todo era que mi mamá estaba donde mi tía con mis hermanos y estaba solo en casa.
- Te aviso cuando llegue
No respondí nada a su último mensaje, me había puesto de mal humor, odie la actitud del Claudio, no sabía quién se creía pintándome escenas, quería mantener todas las cosas en calma por una razón y todo esto no cuadraba con lo que quería.

--.--.--.--.--.--.--.--.--.--.--.--.--.--.--.--.--.--.--.--.

Pasado las 22:00 horas llegó Claudio a mi casa, no estaba de humor, por lo que estaba vestido pésimo, le abrí la puerta y lo hice pasar.
- Quieres algo para tomar – dije siendo cortés
- No, nada – respondió
- Bueno, entonces tu dirás, que te escucho – dije
- ¿Estas solo? – quiso saber
- No por mucho, así que habla – comenté
- Que estas pesado, si de todas formas soy yo quien debería estarlo, me dio mucha lata verte con tu amigo, después de saber que con él haces las mismas cosas que hiciste conmigo y él ni siquiera te respeta como debería – dijo
- No tiene porque hacerlo, solo somos amigos, además no es que tu me respetaras mucho Claudio, no deberías pedirme ningún tipo de explicación, yo te dije que nosotros somos solo amigos y tú tienes polola – terminé
- Lo sé, pero no se que me pasa que me puse celoso de él – dijo – y yo no soy celoso, es solo que es complicado, tengo miles de dudas y no soy yo últimamente – mencionó
- Y que pinto yo en todo eso, si siempre te deje todo claro – mi paciencia se había ido a cualquier parte
- Lo pintas todo Camilo, estoy confundido contigo y la Camila, siento que con ambos lo paso bien, me dan ganas de estar con ustedes, me rio puedo ser yo sin complicarme, me dan ganas de abrazarlos, hacerles cariño y cariñoso yo no soy, no se que wea me pasa – finalizó
- pero hay una diferencia en todo esto – recalqué
- ¿Cuál? – quiso saber
- Que la Camila es tu polola a ella le debes mucho más que a mí que me conoces de hace muy poco – dije
- ya no – me cortó
- ¿ya no qué? – dije confundido
- Con la Camila nos dimos un tiempo, no puedo mas con esto… - no lo deje continuar
- Pero Claudio, ustedes llevan mucho tiempo como se te ocurre hacer eso, debe estar muy mal ella, ni quiero saber me siento terrible – dije
- No podía hacerle eso por lo mismo, no podía estar con ella sintiendo algo por otra, me hechizaste Camilo, acabo de hacerlo y la verdad me siento un poco más liberado – dijo mirando a mi alfombra, me compadecí de él, se veía muy sincero
- y ¿Estas bien con lo que hiciste? – el levantó sus hombros interprete eso como un “no se” – pero Claudio… - no me dejo continuar
- Podrías dejar de ser tan duro conmigo y ser mi amigo un rato y darme un abrazo – dijo – se que parece raro, pero es todo lo que quiero de ti, algo de apoyo, para mi esto no es fácil, siempre he sido abierto de mente, pero nunca pensé que un hombre me podría llegar a gustar tanto – dijo y rompió mi corazón, así que sin mas hice lo que me pidió.
- Lo siento Claudio, nunca fue mi intención hacerte esto – dije
- No es tu culpa, fui yo el que me obsesioné con todo esto, además nunca me ofreciste nada, fui yo el que insistió y sé que no querías, pero tenia que salir de dudas y el hecho de que seas como eres no ayudo a nada mas que me pasaran cosas contigo
Lo abracé por un largo rato, realmente ver a alguien tan macho quebrado me llegó, sabia que no debí jugar con fuego y mas de una historia se me vino a la mente, fue inevitable pensar en Seba y Pipe, no quería un Claudio que me destrozara después.
- Claudio te debo una respuesta del porque no quiero nada contigo – dije
- ¿Qué cosa? – dijo confuso
- La vez que estuvimos juntos me preguntaste porque tu no podías ser mi amigo especial y creo que es justo que lo sepas – dije
Fue así como le resumí mi pasado amoroso con Pipe y Seba, fue raro pero decir todo en voz alta lo hacia real y era una alerta para no repetir las cosas, no quería un retroceso en la vida, pero quizás debía perder el miedo e intentarlo, hay quienes dicen que no cruza el rio quien no se arriesga y a lo mejor esto aplicaba al caso, pero lo dudaba. Cuando terminé de contarle todo Claudio solo me miró
- Por eso Claudio no puedo y no quiero repetir la historia, no quiero sufrir otra vez, me da miedo entregarme otra vez – reconocí
Nos callamos por un largo rato, el silencio no era incomodo mas bien era reflexivo, quizás la conversación con Claudio fue la mejor vía, ambos nos debíamos escuchar para poder sacar nuestras propias conclusiones de todo esto, tras lo que pareció un largo tiempo Claudio se giro y me pilló por sorpresa besándome, no me sentía preparado, así que lo empuje.
- No me rechaces Camilo, por favor no lo hagas – dijo
Díganme débil, tonto, estúpido o cualquier apelativo, pero la realidad es que cedí, mi cabeza me falló y permití que Claudio me besara a su antojo, si bien el beso fue largo, el tinte erótico no existió. Todo que distinto, indescriptible.
- Te prometo que jamás dejaré que nada ni nadie te haga daño Camilo, y si soy yo quien te lo produce no me lo perdonaría y si llega a pasar dímelo y me alejaré por siempre – la intensidad de su mirada me dijo que era sincero.
Esa noche opté por creer en lo que me decía, todo mi ser me decía que era sincero, sentí que Claudio no mentía, pero no todo en la vida es como suena, hoy diría que esa noche opté por ser engañado, hay cosas que en la vida son inevitables y todas las promesas y acuerdos alguna vez se rompen, aunque a lo mejor en su momento fueron dichas de corazón.

--.--.--.--.--.--.--.--.--.--.--.--.--.--.--.--.


Hola a todos
Espero estén muy bien, les escribo después de harto tiempo sin hacerlo, no miento que costó bastante, no tengo mucho mas que decir, solo espero que lo disfruten y como siempre estoy abierto a todos sus comentarios ya sean buenos o malos, toda critica o consejo es bien recibido por lo que los insto a que no se guarden nada.

Como dice mi fiel amiga SIA, I´m Still Here

Queriéndolos siempre
Besos
Camilo xoxo

sábado, 9 de marzo de 2019

TODO EN NUESTRO DESTINO


TODO EN NUESTRO DESTINO

Volver después de tanto tiempo es difícil, leer pasajes de mi vida hoy en día suena duro, hace un año que no escribía, tiempo en el cual muchas cosas han pasado, buenas, malas y muy malas, no tenía claro si quería volver, no después de todo lo que esto ha significado para mí, tener un registro claro de todo ha dolido. He leído y releído todas mis palabras escritas a lo largo de este blog y sin duda alguna me he sumido en una montaña rusa de emociones…

Nunca en mi vida me había detenido a pensar que es la depresión.
Tristeza.
Sueño.
Vacío existencial.
Soledad.
Indiferencia.
Son algunas cosas que me acompañaron a diario, dormir me costaba y es que cuando pasas por cosas que cambian tu perspectiva de vida tan rápido, en un abrir y cerrar de ojos, asimilar todo otra vez suena extraño.

Sentía que algo en mi interior había cambiado, algo me había abandonado, quizás el camilo con ganas de jugar como niño y correr por las calles se había apagado o congelado, por un periodo de tiempo indefinido, o simplemente esto era lo que se sentía crecer y ser adulto, pero en absoluto me gustaba, mi motor de vida había cambiado de rumbo, ¿A dónde? Ni yo mismo lo sabía, solo hacia las cosas en modo automático.
Pero podía decir que ahora estoy mejor, muchísimo mejor, ya no veo todo gris y al parecer la tempestad me ha abandonado, no fue fácil, pero día a día puedo decir que la alegría ha vuelto, tengo claro que no volveré a ser el mismo, pero la vida es sabía y todo esto me servirá mas temprano que tarde, porque simplemente, está todo en nuestro destino.


**--**


Hol@ a tod@s
No se equivocaron de blog ni nada por el estilo, hoy estoy de regreso, no les diré que a full, pero por algo hay que partir, me fui sin decir adiós, dejando la incertidumbre de muchas cosas, pero sinceramente no sabía si en algún minuto volvería a escribir, hoy me di el ánimo de volver, no les diré de lleno el porqué deje de escribir, espero ustedes mismos lo vayan descubriendo, tampoco publicaré tan seguido, aunque tengo todo el compromiso de que asi sea, por lo mismo no se desesperen ni me golpeen si me demoro un poco mas en publicar, solo que hay muchísimas mas cosas que debo hacer.

No se que mas comentarles, solo que en estos días le dejaré por acá mismo un nuevo relato de lo que ha sido mi vida todo este tiempo.

Saludos a tod@s, los quiero <3

Capitulo I - Tentación

Capítulo 1 – Tentación Felipe Sebastián Claudio Tres nombres que trataba de evitar, tres personas que hacían querer desaparecer ...